¿CÓMO LIDIAR CON UN JEFE CAMBIANTE O BIPOLAR?

Publicado el 12 de agosto de 2024, 9:38

Ante un jefe o jefa cambiante, hoy eres un empleado fantástico y mañana eres lo peor y un incompetente, ¿te suena? Es como convivir con el hombre lobo, hoy es fantástico y mañana igual se te come.

En muchos casos tú no eres el inepto, ni él tampoco, el problema es que, es posible que tu superior esté en una lucha interna constante.

El jefe bipolar y su lucha interna

La actitud y las consecuencias de ser un líder negativo puede ser dado por la lucha interna que lleva dentro entre lo correcto y qué debe hacer, entre la realidad que cree que debería ser y la que ha de ser realmente.
Trabajar con un jefe tóxico puede generar bastante inseguridad. Éste puede ser consciente de su falta de ética en ocasiones, mientras que, en otras anda buscando justificación y posteriormente hace como si nada hubiese pasado.
Si a estos altibajos le sumamos la falta de comprensión hacia una supuesta inutilidad de sus empleados, puede originarse un estallido de emociones incontrolables.

¿Un jefe que te humilla puede estar acomplejado?

Bueno, quien sabe. Muchos jefes tienen una actitud tóxica debido a ciertos complejos. En estos casos no desean que salga a la luz su debilidad, lo cual conduce a la frustración, palabras malsonantes, reproches sin sentido o en ocasiones, incluso agresividad y humillación. En cualquier caso, termina por querer reafirmarse y hará cualquier cosa para que todos sepan quién manda.

Esto no significa que no vaya a arrepentirse posteriormente, porque muchos lo hacen aunque se lo callan. Sin embargo, estas personas tienen un patrón de conducta y fácilmente terminarán por repetir la situación, y eso es realmente agotador para quienes deben soportarlo.

Trabajar para un jefe con trastorno bipolar

La persona que sufre esta enfermedad, ya en sí es complicado de sobrellevar en una persona normal. Así que, puede ser mucho más acentuado en una persona con ciertas responsabilidades, y en este caso, hablamos de un jefe bipolar.
Los cambios continuos afectan al sueño y al descanso, por lo tanto, el estrés añadido de un superior se multiplica. La claridad y la tranquilidad pierden protagonismo para cedérselo a la agresividad o a las palabras malsonantes y reproches.
Todo esto conlleva a la pérdida del rumbo y la realidad en muchas ocasiones. Solo en momentos de lucidez y creatividad es cuando se siente mejor y se apreciará su buen humor, hasta entonces, sálvese quien pueda.

Los jefes y las personas bipolares, en general, se obsesionan por tenerlo todo controlado. No les gustan los imprevistos. Son muy exigentes respecto al rendimiento de los demás. Es curioso e irónico, ya que los bipolares están cargados de incertidumbre y nunca sabemos cómo van a actuar hoy ni mañana. Hasta cierto punto podría ser comprensible, aunque todo tiene un límite claro está.

Es curioso y doloroso ver cómo un día te dice que no quiere que te marches, pasando por criticarte en tu ausencia. Te hace sentir culpable por tonterías y se encarga de que pienses que tu puesto peligra. Y al tercer o cuarto día, actúa como si nada hubiera pasado.

¿Cómo actuar ante un jefe insoportable?

Bueno, lo más fácil sería buscarte otro empleo y cambiar tu situación, aunque eso no significa que las cosas sean mejores. Quizá tu siguiente jefe sea peor, nunca se sabe. Otra opción, es poner las cartas sobre la mesa y hablar con tu jefe con mucho respeto. Para ello deberás encontrar el momento oportuno en el que tu jefe esté más tranquilo e inspirado. Ten en cuenta que, para tu jefe, sus decisiones son las correctas y pocas veces se dejará convencer. Así que, estúdialo y encuentra el momento oportuno para ese diálogo.

Otra cosa a tener en cuenta es que, cabe la posibilidad de que se sienta acorralado y decida despedirte. En tal caso, no te sientas culpable porque tú no has hecho nada malo. El problema no es tuyo, sino el de una persona que no sabe razonar. No permitas que su rabia recaiga sobre ti.

Actualmente hay mucha rivalidad y competitividad en las empresas, entre superiores y entre compañeros. Debes tener en cuenta que, si no te toca un jefe tóxico, probablemente tengas que lidiar con un compañero rival o insoportable. Así que, hay momentos en los que, si no hay nada mejor a la vista, deberás poner el asunto en una balanza y cambiar tu paradigma.

Lo mejor que puedes hacer es centrarte en tu trabajo y hacerlo lo mejor que puedas sin que su actitud te influya. Observa a tu jefe bipolar y quien sabe, es posible que aprendas a gestionar sus cambios a tu favor. Sobre todo, no debes tomártelo como algo personal ya que eso lo complica todo. Piensa que eres una persona emocionalmente inteligente que no va a dejarse influenciar. Toca ser valiente y paciente.